Los primeros días de la semana te sentirás bastante irascible, razón por la que cualquier detalle que no te guste te hará estar de mal humor, llegando incluso a provocar alguna de otra discusión con determinadas personas que te rodean, tanto del ámbito laboral, como del personal.
Es normal sentirse así en ocasiones, pero debes intentar controlar esos impulsos y darte cuenta de que los demás no tienen la culpa de que tú estés pasando un mal momento. Intenta ponerte en su lugar y darte cuenta de que no entienden realmente tu comportamiento. La mejor manera de solucionar estos conflictos es abriéndote y contando a aquellas personas de confianza qué te pasa.